Ella me modela el cuerpo con las manos hasta que logra una postura ¿aceptable?
Yo siento el centro. Concentro. Bajo el pecho al respirar, mi cola escapa por detrás, los hombros se suben, la cabeza adelanta. Vuelve a moldear. Camino como un pato. Recta hacia la diagonal.
La disonancia entre mi mente y mi cuerpo arroja ridículos movimientos.
Pie, relevé, relevé. Concentro en el centro. los brazos estirados en diagonal. La mirada perdida en mi cuerpo interior. Pie, relevé, relevé. Tres pasos. Toda mi energía toda, va por la diagonal. Llego al fin. Desarmo.
Creo.

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