jueves, 23 de febrero de 2012

Doscientos setenta y nueve: arte arte arte

Es sorprendente.
Hace dos días pensaba en la frase de Minujín.
Hoy pasa un pibe en bicicleta y la grita. Bardea gratuitamente lo que estamos haciendo.
V. dice: Seguro se va a grabar "El lado oscuro de la luna"
O a pintar el Guernica.

Seguro se siente muy trascendental con su bicicleta a la una de la mañana a una velocidad de locos. Se siente dios en un mundo monoteísta.

Lo nuestro es de papel a simple vista. Durará tres días, como mucho una semana.
No es una palabra.
Es real. Tiene vida propia.
La cabeza se vierte sobre la calle.
Estamos exhaustos y excitados como niños de colonia.
No me explico con palabras sensaciones
Share/Bookmark

domingo, 19 de febrero de 2012

Doscientos setenta y dos: Osadía

-No estoy segura
-Nunca vas a estar segura
-Todo el fin de semana me dolió un ala
-Justamente. No podés quedarte a medio camino, entre el deseo y el miedo
(Respira hondo)

>Es ahora. (Salta)




*Suena la música
Share/Bookmark

viernes, 17 de febrero de 2012

Doscientos setenta y uno: el año en que se mueren todos

Cuando yo era chica escribía triste.
Ahora escribo, por lo general, cuando estoy bien y libre. Por suerte estoy bastante suelta, incluso puedo escribir cartas y diarios íntimos con suma facilidad.
Hoy me enteré que había muerto ella también.
Tengo su bola de contact aquí. Es verde oscura. Y yo nunca aprendí, pero entonces ella empezaba a desprenderse, y capaz tenía la ilusión de que.
Ella estaba muy enojada. Yo no me enojo ya. Casi. Ella estaba cansada también.
Y hace no tantos días, se murió alberto luis. Y la que actuó en el guardaespaldas con kevin cosner.
Pero las calaveras tienen flores de colores.
Y la música está creando matorrales en los oídos.

Dice m. que la muerte está sentada a la mesa, mientras tomamos birra, lo dice después de contarme que ella ha muerto -cosa que yo ya sabía aunque no lo supiera-.
Tengo su bola verde oscura y la miro al lado de las guitarras, como se está quieta, mientras la muerte va y viene, la vida va y viene.
Share/Bookmark

Doscientos setenta: La noche está estrellada y tiritan azules a lo lejos

Pam param pam pam
Él músico dice: el cielo se estrelló
Todos miramos.
Podría ser la destrucción del universo o simplemente unas estrellas.
Me causa gracia.
Después de que el perro cante unas notas agudas
digo:
el perro se estrelló, ahora es una estrella.
No era así?
Share/Bookmark

Doscientos sesenta y nueve: Llevate unos libros

Ella me dijo:
- Mirá en esa bolsa a ver si te interesa algo

Es como que me digan que me gané un kini.
Voy hacia la bolsa como si fuera la punta de un arcoiris *justo hoy que está por llover.

La bolsa es marrón caca pero tras el polietileno (tan cerca del capeletini) hay pessoa y poéticas varias, incluso una mexicana llamada mayté olivares que, entre hojeadas y ojeadas, me despierta la merluza que tengo en el cráneo.
Estoy re contenta.
Cargo mi bolsa y me voy con el tesoro multicolor.
Share/Bookmark

domingo, 12 de febrero de 2012

Doscientos sesenta y ocho: Patito lindo

Cuando voy con mi bicicleta, una y veinte de la mañana, no tengo miedo. Tengo un placer de caballo galopando. Creo que estoy en el momento exacto en el cual el patito feo descubre que no es feo, sino cisne. Que le ha tomado años asumirlo, que le ha costado horrores abandonar la lucha por ser un patito. Le ha costado al principio el amor de sus padres, le ha costado amigos, títulos, cicatrices. Calló una parte de su vida.
Se podía vivir así. Como poder, se podía. Pero ahora que nada a sus anchas y largas aletas que son alas que son aves que vuelan, que son naves que vuelan, que viajan. "Esto viaja", piensa el patito lindo. La música es un avión o un caballo galopando a miles de kilómetros por hora.
No sé si es la voluntad, creo que es el deseo que se ha rebuscado para salir entre la gente. Tanto empujar, se zafa. Y cuando sale es expansivo como un gas.
Share/Bookmark