miércoles, 30 de marzo de 2011

Catorce: Pizza Casera

Mi abuela las hacía así. De formas deformes y con cebolla. O sea, hacer el tuco para hacer la pizza. No la pizza express que comemos ahora los tardíos y no tan tardíos adolescentes. No más pizza con salsa pelada de tetra brik. Cuando se ha conocido la pizza con tuco, hay una marca en la corteza cerebral que cual lunar, a lo sumo se convierte en cicatriz pero jamás desaparece. Estas pizzas son las que hacen las madrasas. Masa Casera, queso mantecoso mal distribuido y fusionado con el tuco del que estoy hablando. Hay un principio dulce en esa pizza, sin llegar a convencernos de que verdaderamente lo es. Algo, un dejo de nostalgia azucarada.
Share/Bookmark

0 comentarios:

Publicar un comentario