martes, 7 de julio de 2015

Trescientos cuarenta y dos: Perdida en la traslación

(Cualquier similitud con film es pura casualidad)
Los martes son días largos, apenas tengo conciencia de mí. Parto tempranísimo para villaelisa, hago zapping en la radio hasta que llego a la oficina con un rompecabezas de noticias. Trabajo, trabajo, mate, mate, empanadas, trabajo, café. Me subo al auto de nuevo: manejo, manejo, manejo. Canto una de shakira que me sé, es del primer disco, yo tenía menos de 15 años. Canto a viva voz y quiero que los vecinos de los otros autos me vean gesticular.
Llego a 60, voy para Berisso. Nos desvían, está cortada. No sé el camino pero veo un 214 y lo sigo. Andamos cantidades. En un momento me distraigo y lo pierdo en un semáforo que no es recíproco. Lo veo irse. Sigo al cardumen que queda. Supongo que todos van para donde yo voy. No tengo mucha nafta, tampoco tengo cobre. Dudo, dudo, dudo, pero ahí voy. Me imagino haciendo señas al costado de una ruta desconocida. Y a lo lejos, aparece la Montevideo, la música.


Share/Bookmark

0 comentarios:

Publicar un comentario